Un buen reposabrazos garantiza que el cliente esté tumbado en la camilla con mayor comodidad y, por tanto, más relajado durante el tratamiento. Hay un reposabrazos adecuado para cada presupuesto y cada camilla. Si tiene dudas sobre qué reposabrazos se adapta mejor a su camilla y a sus tratamientos, póngase en contacto con nosotros.